Domingo - 11 de Agosto - Kamakura y Yokohama

Buenas noches,

Después del día raro que tuvimos ayer queríamos resarcirnos así que nos hemos levantado pronto para poder visitar con calma los dos sitios planedos: Kamakura y Yokohama. Metro hasta Shinjuku para coger el JR hasta Totsuka y de allí la línea Yosuka hasta Kamakura.

Kamakura

Justo antes de llegar a la estación de Kamakura hay otra estación, Kamakurakita, desde donde se pueden visitar varios templos zen muy antiguos y bonitos. Nosotros hemos ido al de Engaku-Ji, el primer templo que mando construir el Shogun de Kamakura. Como podréis ver sus puertas y templos son muy sencillos y austeros (estilo Zen) pero transmiten una gran tranquilidad y ayudan a aislarse del mundo exterior y a meditar, de hechos durante el verano en el templo hacen cursos de meditación e iniciación al budismo zen.

Tras visitar el templo hemos bajado hasta el centro de Kamakura donde hemos comido, hemos hecho algunas compras (había otra tienda Ghibli y una tienda con ofertas muy buenas) y nos hemos dirigido hacia el Daibutsu (Gran Buda) y vaya si es grande!! Mide unos 25 metros y es bastante impresionante. Antes estaba resguardada dentro de un templo pero hace años un tsunami arrasó la costa y se llevó la estructura, dejando sólo la figura, intacta, y desde entonces ha permanecido sin cubierta.

Vuelta a la estación de Kamakura, tren y a Yokohama.

Yokohama

Al bajar en Yokohama hemos ido directamente hasta el barrio chino, hemos visitado las puertas que marcan las entradas del barrio y el templo. Después de ver un montón de tiendas de comida y suvenires de pandas nos hemos dirigido hacia el mar para pasear por el parque Yamashita.

Desde el parque sale un paseo marítimo y entre otras cosas hay atracado un barco que según las guías participó en la II Guerra Mundial, pero que resulta que no es más que un barco de pasajeros… no tiene ni un triste cañón!!!

Hemos recorrido el paseo marítimo disfrutando de las vistas de la ciudad (el “skyline” era especialmente bonito con las nubes rojas por el atardecer) y tras un buen rato paseando nos hemos vuelto para Tokio.

Otra vez hemos tenido un pequeño problemilla de orientación. Esta vez casi llegamos a otra prefectura porque nos hemos empanado jugando en el tren y nos hemos pasado el cambio de línea y cuando Jordi se ha dado cuenta estábamos a punto de volver salir de Tokio en dirección Noreste… por suerte se ha dado cuenta a tiempo, media vuelta y a coger el metro. Cena de bentos en el hotel, descanso del guerrero y mañana: Nikko y los templos Tokugawa.

Destacado del día: En Engaku-Ji hay una campana que es muy antigua, ha sido nombrada Tesoro Nacional y sólo se toca en Año Nuevo, eso sí, la subida hasta ella es rompe-piernas y rompe-guiris… a mí me ha dado un ataque de “risa-asma” en el último tramo y pensaba que no lo contaba!!!! :P

Un abrazo a todos!! ;)